La adolescencia es una época de profundos cambios, en la que los referentes principales comienzan a ser los amigos pasando los padres a ocupar otros planos, se generan discusiones, enfrentamientos, se ponen en duda las normas, se traspasan límites, se cuestiona todo, se culpa a todos. Conseguir que esta etapa importante de la vida, en la que se forja la personalidad, permita asumir responsabilidades, se negocie, se establezcan normas y límites, hábitos saludables y expresión de emociones, a veces requiere de ayuda profesional para la adaptación de todos los miembros de la familia y para la estabilidad emocional.